Collage íntimo

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Trocitos...

sábado, 10 de marzo de 2012

The artist: un películón que te hace enmudecer

El día de Andalucía fui con mi amada esposa al cine.
Esa mañana, de forma paralela al sentimiento patriótico autonómico, creció en mí unas incontenibles ganas de ver una película en la gran pantalla. La noche anterior, la 84ª gala de entrega de los premios de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas (los Oscars) encumbraba a una película inusual, por su factura y por su valentía: "The artist".
No es por ponerme medallas, pero desde que oí hablar de ella me moría de ganas por verla. Evidentemente, tras las 5 estatuíllas (mejor película, mejor director, mejor actor protagonista, mejor vestuario y mejor banda sonora original), mi ansia cinematográfica se disparó hasta convertirse en "ansia viva".
Mi amigo Coque me había contado un suceso verídico profundamente triste: cuando fue al cine a verla (N. Plaza) se acercó a la taquilla y pidió su entrada para la sala en la que proyectaban "The artist":
-Señor (no creo que le dijera "señor" pero bueno, queda mejor), que es una película muda... -informó la taquillera, como tratando de quitarle las ganas de verla.
-Sí, sí, ya -repuso mi amigo-, deme la entrada por favor.
-Pero es que es en blanco y negro -insistió la chica.
-Ya lo sé, señorita -insistió Coque-. ¿Me da la entrada por favor?
Silencio incómodo.
-Verá, señor (sigo sin creer que le dijera "señor"), es que es una película muda y en blanco y negro y no se pasa en todas las sesiones, sólo en algunas...
De verdad, yo creo que esto es pa echarse a llorar. Cinematográficamente hablando, claro.
Estamos tan sumergidos en lo comercial, lo zafio y la más profunda incultura, que el verdadero arte, lo bello, lo sensible, lo inteligente... apenas tiene la posibilidad de sobrevivir saliendo a flote entre los prejuicios y la estupidez. La gente no quiere ver esas películas y, a la primera de cambio, los cines dejan de ponerlas. Entiendo que todo es negocio y lo que no produce se quita, pero, ¡que me parta un rayo si no es una verdadera pena!
Michel Hazanavicius ha ideado y dirigido maravillosamente una deliciosa película que te cautiva y te asombra desde el minuto uno. Aparte de ser en blanco y negro y muda, informo a los escepticos que no sean capaces de imaginarlo por si mismos, que la película narra una cautivadora historia, tiene un inteligente guión aunque casi no tenga diálogos (escasos subtítulos leídos), unos actores principales y secundarios que bordan el difícil papel mudo, una banda sonora sublime (Ludovic Bource) que lo envuelve todo, dando luz sonora al mudo silencio, un vestuario absolutamente verosímil y todo, todo, todo lo necesario para convertirla en una obra maestra, un clásico del séptimo arte.
La película narra de manera ágil, hábil y entretenida la historia de George Valentin (Jean Dujardin), una idolatrada estrella del cine mudo de los primeros años de Hollywood y su declive y caída en el ostracismo con la llegada del cine sonoro a finales de los años 20 del pasado siglo XX. La historia del cine contada a través de la vida de sus más directos protagonistas, los actores... las fulgurantes estrellas que tan pronto suben como se estrellan y desaparecen hechos añicos.
Si hay conflicto, hay historia. En este caso el conflicto se manifiesta en dos facetas, el conflicto en la industria cinematográfica que se divide entre los seguidores y los detractores del "nuevo" cine sonoro y el conflicto personal de George Valentin que se niega a evolucionar, a aceptar lo inevitable: que los tiempos cambian, los cambios llegan y, según reza la inflexible máxima de la naturaleza, sólo quien se adapta, sobrevive.
Para colmo, el célebre actor vive un matrimonio en el que el amor brilla por su ausencia y de su esposa sólo recibe desdén o, en el mejor de los casos, indiferencia. Su pequeño y simpático perrito (es-pec-ta-cu-lar) le acompaña a todas partes, suponiendo la única relación sincera y perdurable de la estrella. Entonces conoce accidentalmente a una chica, Peppy Miller (Bérénice Bejo), una joven y preciosa aspirante a actriz que irrumpirá en su vida de forma que ya no podrá volver a ser la misma.
En fin, no quiero contar más porque espero sinceramente que vayáis al cine a verla. Merece cada uno de los 6,20 euros que cuesta la entrada y te deja la indescriptible sensación de no haber visto jamás nada igual. Sus brillantes escenas aún permanecen en mis retinas y se han aferrado a mi cerebro con una fuerza inusual; la música aún vibra en mis tímpanos y mis labios la tararean involuntariamente hasta el punto que, en ocasiones, me sorprendo a mí mismo caminando alegre como George Valentin, silbando su melodía, con las manos en los bolsillos y mi perrito imaginario revoloteando alrededor de mis pies, contagiado de su luminosidad, de su alegría, de su vida.
Estoy seguro de que las siete personas que estábamos aquella noche en la sala salimos igual de satisfechos y, ¿por qué no?, felices, tras ver "The artist".
¡Sea Vd. joven y vaya al cine!
(¡Qué recuerdos!)

16 comentarios:

Mariluses dijo...

Joder, habrá que verla...

Salva & co. dijo...

Ya estás tardando, Mariluz! Si no te gusta, te devuelvo yo los 6 pavos... pero sólo a tí (por haber sido la primera en conmentar), eh!
A ver si ahora todo el mundo va a querer ir gratis al cine...
Besitos gordos.

Olga Villa dijo...

Yo tambien quiero verla! Y doy fe, de que antes de la gala de los Óscars, ya te morías de ganas de verla!
Ahora solo me falta convencer a mi marido...��
Muchos besos

Salva & co. dijo...

Olguita, ya te dije que, si Pepe no quiere ir, y no encuentras con quien ir, yo voy contigo. A tu marío lo dejamos con el DVD de Braveheart o con "Lo mejor de 75 minutos" y un bol de palomitas... jaja
Un besito

Elo dijo...

A mí también me encantó. Aunque, en un principio, fui a verla más que nada por el entusiasmo de mi marido, tengo que decir que me gustó muchísimo.
Los que me conocen saben que no tengo los mismos gustos que Salva en cuanto al cine, yo soy más de cine comercial, pero con esta película me he dado cuenta que hay que ser un poco más abierto.
No pierdas las esperanzas guapi, algún día conseguirás que me gusten tus películas "de chinos".
Muchas gracias amor. Te quiero.

Salva & co. dijo...

Hola, amorcito! Pa que veas que hay que abrir la mente a cosas nuevas y diferentes. De todas formas, las pelis de chinos en el sofá, por si te duermes... aunque ultimamente el que se duerme soy yo, pero bueno.
Gracias por seguirme el rollete con tanta paciencia guapi, puedo ser muy cansino para mis gustos. Te quiero, preciosura.
por cierto, ya era hora de que dignaras a aparecer un poquito, ¿no? Ejemmm...

Anónimo dijo...

Pues a mi me ha gustado más Dogville.... y a mi hermano el libro por supuesto!!! (que está muy liao y no te puede leer)

El sábado que viene actua en Madrid un chaval muy majete de mi pueblo que es sevillano ¿te vienes a verle?

A ver que excusa tienes... enfadica...

Salva & co. dijo...

Anónimo cebolleta, te convido a ver The artist el próximo fin de semana, bueno, el próximo no, que actua el Nachete en Madrid, el siguiente. Te vienes en AVE y yo te pago la entrada, el AVE lo pagas tú. Yo pagaré luego unas cerves refrescantes...
A tu hermano déjalo que está mu liao enderezando aquello. Además, cuando le digamos que lea el libro nos dirá que le gustó más la película y viceversa...¡Como si no lo conociéramos! jaja
Venga, plimo, que te espero. Por cierto, últimamente me escribes más que el Macintosh. ¡Qué grande ere, plimo!
Besos a la familia.

Onecar dijo...

Que no, que ya la tengo en MP3, para escucharla en el coche, de obra a obra.

Por favor, para que nos dotaron de cinco sentidos? para que tenemos la visión en color HD?, por favor.... no me extraña que la taquillera le advirtiera a tu amigo, si después de pagar 6 pavos, no esta con sus colorines y su Home cinema TXH QTPS.... quemo el cine.

Por cierto el Madrid otra vez campeón, y Clemente...... que me dices de Clemente y no te hablo del Papa.

Un beso primo.

Salva & co. dijo...

Primo One: en MP3 sí que sería un coñazo porque sólo escucharías la música, cosa que tampoco está nada mal...
De todas formas, que nadie se alarme, que no digo que tenga que ir a verla todo el mundo, ni siquiera que le gustará a todo el que la vea. Sólo digo que a mí me ha gustado más que comer con los dedos y que es un peliculón y que es mu triste que en los cines dejen de ponerla (que de lo otro ya hay demasiado) y que las taquilleras anden quitándole las ganas a la gente y que ojalá se hicieran más películas tan llenas de talento y que por una vez, y sin que sirva de precedente, no me han dolido los 6,20 pavos que tuve que pagar para verla y que El Hombre Elefante de David Lynch (1980),La Lista de Schindler de Steven Spielberg (1993), Manhattan de Woody Allen (1979) y Toro Salvaje de Martin Scorcese (1980) son grandes películas de la historia del cine hechas voluntariamente en blanco y negro.... hombre... muda ninguna, pero ¿no tiene eso encanto? ¿Y los huevos de hacer algo tan alejado de lo comercial?
Lo chungo es que es francesa... con lo bocazas que son...
¡No sé qué voy a hacer con vosotros... jaja!
Un beso gordo, primo.
PD: El madrid y Clemente me dan un poquito igual, bastante tenemos ya con lo que tenemos. Quizá si salieran en ByN y estuvieran muditossss...

Anónimo dijo...

Yo he ido a verla hoy y me ha encantado!

Siento decirte, Salva, que hay un cartel en el Nervión Plaza que advierte de que la peli es muda y en banco y negro. Y que en tu sesión érais multitud: en la mía estábamos cuatro.

Pero yo la he disfrutado y la sigo disfrutando. Besos.

Bea

Yo no soy sonsi dijo...

Increible lo de la taquillera. La muda debía ser ella.

Salva & co. dijo...

Hola, Bea! Hombre, por fin alguien que ha ido a verla... pensé que mis palabras caían definitivamente en saco roto. Me alegra que la hayas disfrutado, Bea. Y es verdad que se sigue disfrutando mucho después de haberla visto por esas escenas que se quedan en la retina y esas ganas de bailar claqué que hacen que los pies se te vayan un poco.
Lo del cartelito es de traca. Supongo que la taquillera se habrá cansado de advertirlo y habrá pedido a su encargado/a que coloque el cartel de marras. Spain is different!
Besitos para los dos.

Salva & co. dijo...

Gracias, Silvia! Supongo que la taquillera cumple órdenes de advertirlo porque, probablemente, habrá ocurrido que haya protestado gente por haber descubierto una vez comenzada la peli que era muda y en B/N.
-¡Pero cómo no avisan de esas cosas! -habrá tronado algún garrulo ante la taquillera-. Niña, dame el libro de reclamaciones... y que me devuelvan el dinero de la entrada.
Se avisa y así nadie puede quejarse luego.
c'est la vie... o algo así.
Besitos.

Anónimo dijo...

Unos días después y en sesión matinal, que es más flojilla, éramos ocho, así que no va tan mal! Peliculón, musicón y actorazos. Momento sublime cuando se hace de noche y el chófer le sigue esperando...

Yo te recomiendo "Los descendientes", supongo que ya la has visto, pero por si tu "descendencia" no te lo ha permitido, corre antes de que la quiten.

QUIERO UN PERRO!!!

Un besito, criatura. Muchas gracias por tu recomendación!

Barbie cinéfila

Salva & co. dijo...

Hola, Barbie cinéfila! Jopetas, qué alegría verte por aquí! Me alegro de que coincidamos en el gusto por esta pequeña joyita de película. El chófer es un personaje brutal, lleno de emotividad. La fidelidad en persona!!! ¿Sabes?, cuando me pongo a recordar escenas me entran unas ganas horribles de verla otra vez. grrrr...
"Los descendientes"...mmmm... no la he visto, pero ya había oído hablar de ella muy bien en programas y a personas. Intentaré ir a verla, pero vamos al cine con cuentagotas por culpa de mis amados descendientes. Me la apuntaré por si suena la flauta.
Espero que te vaya todo muy bien. Te llamo y nos contamos un poquito la vida, ¿vale?
Ciao, caríssima. Tanti bacioni per te.